El Proyecto “Empodérate, Cuida tu vida” del CEDEAL, tuvo una nueva visita de Inés Rummel y Alex Schneider representantes de de Pan para el Mundo , quienes vinieron desde Lima, para evaluar el avance de este Proyecto de Prevención de Infecciones de Transmisión Sexual, ITS y VIH/Sida en el Ecuador.
La agenda prevista contempló un recorrido por el Colegio Abdón Calderón, ubicado en la parroquia del mismo nombre, donde se aplicó la guía metodológica del CEDEAL, para la formación de docentes en educación para la sexualidad. Posteriormente viajaron al sector de la Cooperativa Jaime Roldós Aguilera, zona de influencia del Proyecto, en el componente de educación comunitaria.
En el Colegio Abdón Calderón, con una población de 1.200 estudiantes en jornadas, matutinas, vespertinas y nocturnas, se estableció un conversatorio con la trabajadora social del Plantel, Amparo Barrionuevo quien comentó que en dicho Colegio se ha transversalizado el tema de la educación para la sexualidad a través de talleres dirigidos a todos los profesores que intervienen en el proceso formativo.
Para el efecto, se elaboró un Proyecto y se replicó la capacitación con la guía a los inspectores y profesores dirigentes se reforzaron los temas y tuvimos una gran acogida por parte de los estudiantes. El material que nos brindó CEDEAL, es muy bueno, nos facilita el trabajo, porque a más de la guía pedagógica está acompañado de materiales audiovisuales de fácil captación por parte de los jóvenes.
Hemos empezado a trabajar con los octavos de básica en lo que es equidad de género y luego con el tema de la sexualidad, salud sexual y reproductiva, para llegar a las infecciones de transmisión sexual y el VIH/Sida. Los mismos contenidos ya más avanzados con novenos y décimos del ciclo básico y los chicos han demostrado gran apertura a los temas y una participación activa.
Sobre el tema del embarazo adolescente que al momento es una realidad en el país que ha ido creciendo, la trabajadora social, señala que en el Colegio tienen 8 muchachas embarazadas por noviazgo, no por violencia sexual y que ellas reciben todo el apoyo y la motivación para asumir la responsabilidad. Se da un trabajo integral, con ellas, con los padres de familia, para que acepten la situación y con los padres de los bebés.
Posteriormente, se recorrió la zona de la Cooperativa Jaime Roldós Aguilera y se llegó hasta la casa de una de las promotoras comunitarias, Esther Maldonado, ubicada en el sector de la Pisulí, donde estaban reunidas un grupo de mujeres, que recibieron los talleres de prevención y que conversaron de sus experiencias en torno a cómo cambió su vida, especialmente en el tema de la violencia de género a partir de Proyecto.
Esther Maldonado destacó que se reúnen cada quince días y que fortalecen la unidad del grupo, y que si bien los talleres se han cumplido en varios barrios y sectores de esa amplia zona urbano periférica: como por ejemplo sólo de la Pisulí que está bajo su responsabilidad: en Colinas, La Planada, El Rancho y otros, no quisieran que solo se quede en talleres de educación ciudadana y de derechos humanos, sino que se conforme una red de mujeres, que asuma un rol protagónico para que todas las necesidades prioritarias de ellas, como trabajo, atención en salud y demás demandas específicas del sector, se concreten.
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